miércoles, 17 de junio de 2009

Al Sur de la Cara Norte

Circo de Cotatuero y Brecha de Rolan. Fotografía realizada por: Lt (2006)

La cara norte de las montañas suele ser la más dura debido, principalmente, a las condiciones meteorológicas tan adversas que allí reinan. Las caras norte están reservadas a grandes alpinistas, expertos y con experiencia, capaces de afrontarlas con bastantes garantías de éxito, y que aún así, no siempre consiguen llegar a la cima.

Empecé con 8 años a hacer montaña. Un campamento de verano en Ordesa, donde, acarreando una mochila que era más grande que yo, me llevaron a dormir a las planicies que se encuentran por encima de la Cola de Caballo. Aún con esa edad, ya supe apreciar la belleza de todo lo que me rodeaba. Y todo lo que había visto traté de contárselo a Adolfo.

El me escuchó y quiso ver todo aquello que yo le contaba con sus propios ojos, así que, al año siguiente, volvimos a Ordesa, donde nos dejamos picar por eso que llaman “el gusanillo”.

Pasaron los años y Adolfo se empeñaba en volver una y otra vez a Pirineos. Yo entré en la adolescencia y me enfadé con el mundo, como hacen la mayoría de los adolescentes, así que, al principio iba a la montaña a regañadientes, sin disfrutarla. Estaba enfadado con el mundo, y por fin dije que jamás volvería a la montaña. Estaba muy enfadado con el mundo.

Adolfo siguió haciendo montaña, trayendo historias de grandes aventuras que yo escuchaba imaginando como sería aquello, hasta que un buen día se me pasó el enfado y le dije, “me voy contigo”.

A partir de ese momento, hemos vuelto a hacer montaña juntos siempre que las circunstancias nos lo han permitido, y también por separado, en cuyo caso, echábamos de menos al compañero que faltaba.

Llegamos al día de hoy, donde estamos a 4 días de emprender una nueva aventura juntos, donde Adolfo me llevará a descubrir las maravillas que rodean Benasque. Yo sólo conozco El Aneto (que he ascendido en 2 ocasiones) y según me cuenta, hay lugares espectaculares que tengo que conocer.

Por todos estos años de montaña compartida, por todos esos años en los que él insistió en seguir haciendo montaña demostrándome que era algo que merecía la pena, tengo que darle las gracias.

Muchas gracias Adolfo. De todo corazón, muchas gracias papá.

Yo no soy un gran alpinista, ni siquiera un pequeño alpinista… Simplemente me gusta la montaña, las sensaciones que me hace sentir, y con el paso del tiempo intento afrontar retos cada vez mas difíciles, que me dan la posibilidad de mejorar y aspirar a llegar a sitios cada vez más inaccesibles, pero por ahora, me quedo al sur de la cara norte…

Fotografía realizada por: Lt (2007)

1 comentario:

  1. Entrañable.Enhorabuena por el trabajo echo a Adolfo. Conseguiste hacer un "hombrecillo de Campo" a LT.
    y...... ¿para cuando LT enseñará a algún "Adolfito"? Esto hay que transmitirlo de generación en generación.......
    Esa foto estará completa con otro LT-ito.

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