Ando fotografiando... Lisboa, Cascais y Sintra...

Luna sobre Lisboa. Ibamos a ver la puesta de sol al Castelo de San Jorge, pero llegamos tarde... Fotografía realizada por: Lt (2008)

Raquel me dijo “Tenemos que ir a Lisboa”…

Reconozco que nunca me llamó la atención. Tenía la idea de que Portugal era un país sucio, cutre… pero ella insistió y me convenció con un “Te va a encantar. Verás que fotos vas a poder hacer”… Y llevaba razón. Lisboa es una ciudad con un encanto especial, llena de rincones maravillosos que merecen la pena ser descubiertos, la luz del atardecer la convierte en una ciudad llena de misterio y de magia… Además, Lisboa tiene algo que suele propiciar unas fotos, cuando menos, curiosas. Lisboa tiene tranvías…

Tranvias por las calles de Lisboa. Fotografías realizadas por: Lt (2008)

Puente 25 de Abril. Fotografía realizada por: Lt (2007)

Torre de Belem. Fotografías realizadas por: Lt (2008)

Otro día Raquel dijo “Vamos a comer a Cascais. Conozco un sitio que, además de comer bien, es precioso”. Y nos fuimos a Cascais, a 25 km de Lisboa. La verdad es que el pueblo es encantador, con muchísimos sitios donde comer bien, pero, al igual que Lisboa, Cascais tiene algo que engancha para hacer fotos. Cascais tiene faro. Un faro precioso, situado en un lugar magnifico. Tanto es así, que esa misma noche, estando de vuelta en Lisboa (ibamos a ver la puesta de sol, pero llegamos tarde... pero hicimos la primera fotos de esta entrada) yo propuse “¿Y si volvemos al faro de Cascais y le hacemos unas fotos nocturnas?” Y volvimos…

Faro de Cascais. Fotografía realizada por: Lt (2007)

Y no nos podíamos ir de Lisboa sin visitar Sintra, o más bien, su castillo, el Palacio da Pena. Jamás podría haber imaginado que me iba a gustar tanto. Es espectacular. Con unos colores y unos contrastes que te invitan a buscar y rebuscar la vista más curiosa, el rincón más escondido… Es un lugar para hacer miles de fotos… y nunca acabarías…

Palacio da Pena. Fotografías realizadas por: Lt (2008)